Las fundaciones son los cimientos de cualquier estructura, son la base que soporta todo, tanto la propia estructura y la operación con el funcionamiento diario de equipos, procesos y personas.
Hay tantos tipos de fundaciones como diversos tipos de estructuras y lo mismo sucede con las Fundaciones, las organizaciones que están en el ojo de todos en la actualidad, con un poder que ostentan y que ha evidenciado tienen, junto con un contraste abismante por la incertidumbre que significa no tengamos absolutamente ninguna idea de hacia dónde van sus acciones y a quienes benefician. Lo peor de todo es que no sabe cuánto dinero reciben de todos los chilenos.
¿Existe por ley de transparencia un listado de planes de acción , resultados y beneficiados por las fundaciones? Porque la frase típica es: son los impuestos que cada día pagamos directamente desde nuestro sueldo y el pago de todos los bienes y servicios, es gracias al dinero de todos los chilenos.
Conozco personas, tengo amigos y muchos desconocidos que tienen una labor en fundaciones aportando a mejorar la calidad de vida de personas, totalmente extraños o que en su vida su pudieron haber cruzado, trabajando a dedicación completa o en horarios extras para lograr la satisfacción de otros.
En muchos casos, un espíritu desinteresado en lograr que otros puedan vivir mejor y alcanzar las oportunidades que cada vez menos tienen acceso por ser excesivamente costosas.
Estoy convencido que el orden de prioridades es la educación, con la cual se establecen relaciones, se aprenden habilidades y se obtienen competencias para desarrollar un oficio o trabajar en cualquier ámbito profesional. Y digo esto porque la falta de educación significa no tener valores, respeto y aprovecharse para obtener beneficio fácil.
¿Cuántas necesidades hay en nuestro país? Y en todo Latinoamérica se repite la situación, nuestro subdesarrollo se transforma cada día en un lastre, más que en una oportunidad para mejorar las cosas. Toda esta trama de fundaciones de cartón tergiversa las mejores y más sensatas intenciones.
Al mismo tiempo, tanto espíritu emprendedor con ganas de generar cambios, en los cuales me sumo, a muchos se les rechaza ayudas mínimas para capitalizar e impulsar sus negocios que en muchas ocasiones son verdaderas soluciones que impactan a todo nivel. Desde pequeños emprendedores hasta ideas que pueden cambiar el curso de grandes industrias.
Los emprendedores que automáticamente se transforman en figuras de empresas, porque deben preocuparse de temas administrativos, finanzas, operaciones, servicio al cliente, distribución, prospección de clientes, hoy siguen sin una oportunidad para impactar en el país. Perdemos de vista lo más simple, hay muchas ideas que a diferente nivel tienen diferentes grados de impacto, pero exigen planes de negocio y estu- dios de orden profesional para recibir ayudas que son insignificantes comparadas con las grandes sumas de dinero que reciben organizaciones denominadas Fundaciones y que no responden a nadie.
Entonces, la pregunta que nos hacemos tantos: ¿Es un problema del sistema, o hay inescrupulosos aprovechándose, o es un sistema armado perfectamente para defraudar al Fisco totalmente organizado y que toda la esfera política se beneficia de ella? La caja de pandora está en pleno desarrollo, y sería esperable medidas ejemplificadoras para ir contra quienes no aportan. Veamos si no pasa la famosa “retroexcavadora” y se tapa la complementa la caja de pandora.
¿Qué fundación conoces que realmente está aportando a generar verdaderos cambios y mejorando la calidad de vida de las personas? Cuéntame tu historia y experiencia.